LOS SIETE PECADOS CAPITALES DE FACEBOOK


1.- Ira

Desafortunadamente, muchos comentarios en Facebook son irrespetuosos, ofensivos e irrepetibles. He leído estados por medio de los cuales las personas han atacado a sus seres queridos con palabras que todo el mundo puede leer online. Tengo noticias para ti: Facebook no es el sitio correcto para hablar mal de tu familia (de hecho, ningún sitio es el sitio correcto para hacer eso). Si eres un cristiano, tus palabras se tienen que caracterizar por bondad, amabilidad y dominio propio. No te conectes a Facebook si te sientes enfadado o irritado. Da una vuelta. Toma un poco de aire y pide perdón al Señor. No digas algo que luego lamentarás.

2.- Pereza

Otro pecado capital es la pereza, o sea, la indolencia, el no hacer nada, el perder el tiempo. ¿Cuántas horas estás tú sentado delante de la pantalla solamente comentado, leyendo y mirando páginas sin ningún propósito fijo? Dios te ha dado energía y un cuerpo con un propósito. No pierdas todo tu tiempo y vitalidad en las redes sociales. Hay personas en tu hogar (y fuera de él) que necesitan tu amor, cuidado y atención. Dios quiere que tú los bendigas. No permitas que ellos pierdan bendición por tu pereza constante. 

3.- Avaricia

Algunas personas en Facebook sólo quieren más y más. Sólo desean tener más y más amigos y seguidores y les da absolutamente igual la gloria de Dios. En vez de publicar contenido cristocéntrico para bendecir a otros, su única preocupación es subir material para conseguir más popularidad y “likes”, por ejemplo, “Envía este mensaje a diez personas y Dios te bendecirá.” Este espíritu avaro no les permite ver a sus seguidores como seres humanos reales con problemas reales. Solamente ven a los demás como ‘capital social’ para ser usado y abusado según sus propios caprichos y antojos. Tal avaricia es una fuerza deshumanizante y anti-cristiana.

4.- Envidia

La envidia es una muy buena amiga de la avaricia. Y es igual de fea que ella. La envidia se pone celosa cuando alguien tiene más que ella. Si tu corazón no está plenamente satisfecho en Cristo luego te sentirás mal cuando un amigo tuyo tiene más amigos en Facebook que tú o si su página de Fans es más exitosa que la tuya. Pero en vez de enfadarte cuando tu rival prospera, ¿por qué no matas a la enviada invitando a tus contactos a poner “like” en su página? Regocíjate en cómo Dios le usa para compartir la Palabra online. No tengas envidia de él (ella). Promueve la página de tu amigo (amiga) y bendícele.

5.-Lujuria

Uno de los graves problemas entre la juventud cristiana es el subir fotos ‘reveladoras’. No sé cuántas imágenes indeseables habré yo visto en las últimas noticias de Facebook (y estoy seguro de que te ha pasado a ti también). Entiende bien esto: tu cuerpo existe para la gloria de Dios, no para ser exhibido online con el fin de provocar lujuria en otros. Solamente los paganos intentan seducir a otros del sexo opuesto con sus cuerpos. ¿Qué tipo de testimonio podría un cristiano ‘erótico’ dar de Cristo?

6.-Orgullo

Al leer los comentarios de varias personas en Facebook, parece bastante obvio que el mundo gira alrededor de ellas. “Sólo mi yo” es su tema favorito. No se cansan de hablar de sus sentimientos, sus problemas, sus vidas y sus conquistas. Pero si toda la vida del creyente pertenece al Señor, ¿su cuenta de Facebook no debería existir para magnificar su nombre? Así que en lugar de subir tanta información acerca de ti, ¿por qué no te dedicas a compartir versículos de las Escrituras o pensamientos devocionales o promover buenas causas?

7.- Gula

La gula es glotonería o indulgencia excesiva. Demasiado Facebook no es bueno para ti. Los primeros centros de rehabilitación para personas adictas a las redes sociales acaban de abrir en los EEUU. El hombre no fue creado para pasar veinte cuatro horas del día delante de una pantalla. Fue hecho para cultivar huertos, trabajar, relacionarse con otros y experimentar las sensaciones de la auténtica vida. Planifica tu tiempo online cuidadosamente y sólo conéctate el tiempo que sea necesario. Echa fuera el demonio de la glotonería de tu vida. No permitas que Facebook se convierta en una adicción. Si no puedes pasar una hora sin conectarte a Internet, tal vez la señorita Red Social está empezando a ser un ídolo para ti. Dios no quiere que haya rivales en tu corazón.





Will Graham
*Visita:  Will-Graham

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ACERCA DE MI

Tuve mi encuentro con Jesus en febrero del 2013, Entonces oí la voz del Señor, que decía: «¿A quién voy a enviar? ¿Quién será mi mensajero?» Yo respondí: «Aquí estoy yo, envíame a mí.» (Isaías 6:8) muchos le llaman fanatismo, yo le llamo pasion.

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