Vivo en una generación de microondas, queremos que todo esté listo en 5 minutos y si es menos mucho mejor.
- Vivo en una generación en que el matrimonio se ha convertido en una opción más no en una decisión. El matrimonio es un regalo de Dios, pero pocos lo entienden; prefieren vivir solos, dedicarse al trabajo y hacer mucho dinero, otras personas se casan pues un bebé viene en camino ¿Qué asegura que ese matrimonio basado en una opción se mantendrá vivo a pesar de los problemas? El matrimonio es un compromiso que se realiza ante Dios, pero vivimos para lo fácil, el divorcio. ¿Podría decirse entonces que el problema es nuestra falta de compromiso? No nos comprometemos porque no sabemos como, pues no nos enseñan eso, mi generación está más preocupada en lo material antes que en los valores familiares.
- Vivo en una generación en que ser madre se convirtió en un descuido más no en un anhelo. Vivimos tan deprisa que no vivimos el tiempo adecuado para cada etapa de nuestra vida. Las estadísticas de Ecuador dicen que 1 de cada 3 adolescentes son madres, es aterrador saber que esta generación está más predispuesta a buscar los placeres de la carne antes que ponerse a pensar un momento en el futuro, vemos a corto plazo y ¿Cuál es la solución que han encontrado los padres? Enseñar sobre sexualidad en los colegios… Perdón, pero… ¿Esa es la gran solución? ¿Decirles a los jóvenes que está bien involucrarse con alguien solo para desahogar las ganas? No es lo correcto, lo correcto es decirles a los jóvenes que el cuerpo es un templo de Dios y por tal motivo hay que respetarlo, más no ensuciarlo.
- Vivo en una generación en que al pecado lo llaman “Moda”. Eres anticuada, no tomas, no te drogas, no fumas, no acudes a discotecas… ¡Que aburrida eres! Es la respuesta de los pseudoamigos, pero ¿A quien quieres agradar a tus “amigos” o a Dios? Si tienes el temor de Dios en tu corazón, sabrás decir No a esas tentaciones, de lo contrario el mundo te absorberá en sus deleites y pecados.
- Vivo en una generación, en que al comportamiento machista del esposo lo llaman “Hombría”.¿Se puede considerar hombre a aquel que es capaz de pegarle a su esposa? Cuando la Biblia claramente nos dice “Vosotros, maridos, igualmente, vivid con ellas sabiamente, dando honor a la mujer como a vaso más frágil, y como a coherederas de la gracia de la vida, para que vuestras oraciones no tengan estorbo” (1 Pedro 3: 7) Dios desea esposos consagrados a su amor mutuo y que entre los dos lo honren.
- Vivo en una generación en que al feminismo de la esposa lo llaman “Igualdad de derechos”.Lamentablemente hemos hecho a un lado toda la palabra de Dios, sabemos que Dios hizo primero al hombre y luego a la mujer, pero no entendemos porqué nos hizo en ese orden “Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra.” La palabra “Señoree” significa que Dios le otorgó al hombre poder y autoridad para mandar, no podemos quitarle esa autoridad de cabeza del hogar que Dios le ha dado al hombre no a la mujer. ”La mujer fue sacada de una costilla del costado de Adán; no fue sacada de su cabeza para gobernarlo, ni de sus pies para ser pisoteada por él, sino de su costado para ser igual a él, bajo su brazo para ser protegida y junto a su corazón para ser amada.”
ACERCA DE MI
Tuve mi encuentro con Jesus en febrero del 2013, Entonces oí la voz del Señor, que decía: «¿A quién voy a enviar? ¿Quién será mi mensajero?» Yo respondí: «Aquí estoy yo, envíame a mí.» (Isaías 6:8) muchos le llaman fanatismo, yo le llamo pasion.
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